Cada vez son más los extranjeros que llegan hasta nuestro país buscando oportunidades laborales y estabilidad. Es por esto que los empleadores chilenos deben conocer cuáles son los requisitos que todo trabajador proveniente del extranjero debe cumplir para trabajar en el territorio nacional.
De acuerdo a la ley, los ciudadanos extranjeros que deseen trabajar en nuestro país deben contar con una visa especial o un permiso transitorio que lo autorice a cumplir compromisos laborales mientras gestiona su visa correspondiente. Estas exigencias buscan proteger los derechos tanto de migrantes como de los chilenos.
Los permisos y visas que pueden solicitar los trabajadores extranjeros están descritos tanto en el Decreto Ley N°1094, donde se establecen las normas sobre extranjeros en Chile, como en el Reglamento de extranjería (Decreto N°597).
En abril de 2018 el Gobierno anunció una reforma a la Ley Migratoria, la que incluye una reformulación de los visados temporarios, eliminando los permisos temporales por motivos de trabajo, e incluyendo nuevas alternativas de visado. De esta manera los ciudadanos extranjeros tienen las siguientes alternativas disponibles:
Es importante destacar que cuando una persona solicita un permiso de residencia no queda habilitada automáticamente para trabajar, sino que debe esperar a que se apruebe y quede registrada en su pasaporte.
Si un extranjero desea trabajar mientras su visa temporaria o sujeta a contrato está en trámite, debe solicitar el permiso de trabajo para solicitantes de visa de residencia, el cual tiene un costo equivalente al 50% del valor de la visa sujeta a contrato, según la nacionalidad que corresponda.
Un trabajador extranjero que cuente con un contrato al día tiene exactamente los mismos derechos que cualquier trabajador chileno, salvo excepciones puntuales, como limitaciones para ejercer en la administración pública, entre otros. En Chile todos los trabajadores, independiente de su nacionalidad, se encuentran protegidos de acuerdo a lo que contempla la Ley 16.744 en caso de sufrir un accidente laboral, de trayecto o enfermedad profesional, y por lo tanto tienen garantizado el acceso a las prestaciones médicas otorgadas por una mutualidad.
Además, los trabajadores migrantes también pueden afiliarse y cotizar en una Administradora de Fondo de Pensiones (AFP). Los únicos casos que tienen derecho a eximirse de esta afiliación son aquellos en los que el trabajador cuenta con un grado académico técnico y se encuentra afiliado a un régimen de previsión social del extranjero que lo cubra en caso de enfermedad, invalidez, vejez y muerte.
Si un trabajador extranjero es finiquitado, puede perder su visa, en el caso de ser sujeta a contrato. En caso de querer seguir en nuestro país, el trabajador cuenta con un plazo de 30 días para regularizar su situación y solicitar una nueva visa. En el caso de los trabajadores con visas temporarias, de estudiante o turista, no cambia su permiso y puede continuar su estadía en el país.