A lo largo del tiempo, la administración de vacunas ha permitido controlar enfermedades graves que incluso pueden provocar la muerte, por eso es fundamental que los padres conozcan cuáles deben ser aplicadas a los niños de acuerdo a su edad.
Este tipo de medicamentos biológicos se inyectan subcutánea o intramuscularmente y provocan la generación de anticuerpos que protegen de enfermedades o infecciones.
En nuestro país el Ministerio de Salud administra gratuitamente nueve tipos de ellas y a pesar de que no son obligatorias existe una muy buena cobertura, lo que ha permitido controlar diversas patologías.
¿Qué pasa si no se vacuna a un niño en el mes correspondiente?
El Ministerio de Salud usa un calendario que sirve como guía para los padres, pero es posible administrar una segunda o tercera dosis de vacuna con desfase y de todas formas la curva de inmunidad estará completa.
En el caso de los lactantes de menos de dos años se debe estar más alerta porque son más vulnerables a enfermedades. La recomendación es que aun cuando haya un retraso, se completen las dosis en los tiempos más acotados posibles.
Para no olvidar: registro de las vacunas
Como casi el total de las vacunas se aplica a menores de edad, el registro de ellas la llevan los padres y la mayoría de las veces ese documento se pierde, lo que genera un problema en la adultez, ya que si ocurre alguna situación particular las personas no saben contra qué enfermedades se encuentran inmunizados.
Por ejemplo, para viajar a ciertos países se exige estar vacunado contra ciertos virus y muchas veces las personas no tienen cómo comprobarlo. Es importante que los padres guarden el carnet de vacunación, porque en el futuro puede ser útil.