A veces conocemos nuestros malos hábitos y vivimos con ellos sabiendo que deberíamos cambiarlos. Otras veces, no logramos reconocerlos hasta que empiezan a afectar nuestra vida diaria negativamente. De cualquier forma, combatir estas conductas no es tan difícil como pareciera.
Dejar atrás malos hábitos alimenticios o relacionados a vicios como el tabaco o el consumo excesivo de alcohol requiere, en primer lugar, de compromiso, fuerza de voluntad y motivación real para generar un cambio en nuestras vidas.
Emprender este camino significa sacar de nuestra vida algo que nos incomoda, pero no será tan fácil dejarlo ir. A continuación, te presentamos un camino a seguir para desprenderse de estos malos hábitos:
- Visualiza el cambio: proponte erradicar esos malos hábitos de tu vida, asume que existen y trabaja por alejarlos de tu día a día. Recuerda que es mejor dar pasos lentos y seguros, que adelantarse y tropezar.
- Planifica tus acciones: es importante para que sean lo más efectivas posible. Rompe con tus costumbres proponiendo nuevas metas pequeñas constantemente. Supérate a ti mismo todos los días.
- Revisa tus rutinas: ya que en ellas suelen esconderse los malos hábitos. Por ejemplo, si fumas un cigarrillo saliendo del trabajo, prueba cambiando tus rutas, o si tomas tu té con demasiada azúcar, prueba tomando agua o jugos naturales.
- Comparte tu progreso: atrévete a expresar que estás cambiando, dile a tus amigos y busca grupos de apoyo. Esto ayudará a que tu experiencia se transforme en algo colectivo y tengas el impulso de los recordatorios de tus seres queridos.
- No te dejes vencer: recuerda que recaer es normal y cualquiera puede tener un mal día. Si te llega a ocurrir, no dejes que esto te derrote. Enmienda tus errores y retoma el camino para eliminar ese vicio.
Los malos hábitos no nos definen. Podemos superarlos y construir mejores relaciones con nuestro entorno y con nosotros mismos. Por eso, recuerda que el autocuidado también implica dejar atrás eso que te hace daño. Ahora que sabes cómo hacerlo, solo queda en ti tomar ese primer paso hacia una vida más sana.