Autoridades saludaron a accidentados laborales en hospital del trabajador ACHS

En el marco de la conmemoración del Día Internacional del Trabajo, ministros de Estado, parlamentarios, dirigentes sindicales y representantes del mundo empresarial visitaron a pacientes que están en proceso de rehabilitación y reinserción tras sufrir un accidente laboral.

Ministra del Trabajo, Alejandra Krauss, expresó que un objetivo central de la nueva Política de Seguridad y Salud en el Trabajo es perfeccionar el actual sistema de registro de los accidentes laborales y la creación de un sistema de información que facilite la coordinación de las instituciones encargadas de la protección de la vida y salud de los trabajadores.

Autoridades de gobierno, dirigentes de organizaciones sindicales y parlamentarios visitaron a los pacientes internados en el Hospital del Trabajador ACHS, en el marco de la conmemoración del Día Internacional del Trabajo.

La actividad contó con la presencia de la ministra del Trabajo, Alejandra Krauss; el Ministro de Desarrollo Social, Marcos Barraza; el subsecretario del Trabajo, Francisco Díaz; la subsecretaria de Previsión Social, Jeannette Jara; el Superintendente de Seguridad Social, Claudio Reyes; el vicepresidente de la ACHS, Andrés Santa Cruz; el presidente de la Central Autónoma de Trabajadores (CAT), Oscar Olivos; la presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores, Bárbara Figueroa y el presidente de las comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados, Osvaldo Andrade y la presidenta de la Comisión del Trabajo del Senado, Carolina Goic, entre otras autoridades.

La Ministra del Trabajo, Alejandra Krauss, destacó que “hemos dado grandes pasos los últimos años para instalar una cultura de la seguridad y salud en el trabajo, necesaria para que todos los actores del sistema, empleadores, trabajadores y Gobierno, internalicemos esta materia como una dimensión fundamental del trabajo”. Además, destacó que “entre los objetivos de nuestra Política de Previsión Social, se encuentra el perfeccionar el marco normativo en materia de seguridad y salud en el trabajo; fortalecer la institucionalidad fiscalizadora, de manera de garantizar un cumplimiento efectivo y oportuno de la normativa; garantizar la calidad y oportunidad de las prestaciones por accidentes del trabajo y enfermedades profesionales, otorgadas por los organismos administradores de la ley 16.744 y disminuir la ocurrencia de accidentes del trabajo y enfermedades profesionales, mejorando el procedimiento de pesquisa, diagnóstico y reporte de tales siniestros. Por consiguiente, el perfeccionar nuestro actual sistema de registro y notificaciones de los accidentes del trabajo y enfermedades profesionales es un objetivo central de nuestra Política así como la implementación de un registro estadístico estandarizado y actualizado de accidentes del trabajo y enfermedades profesionales que sea confiable, eficiente, validado así como la creación y mantención de un Sistema de Información que facilite la coordinación de las instituciones encargadas de la protección de la vida y salud de los trabajadores y trabajadoras, permitiendo una adecuada interacción para efectos de formulación de políticas, investigación, estudios y fiscalización”.

Agregó que “esperamos contar al mediano plazo, con un completo sistema de Seguridad y Salud Laboral de carácter nacional, con respeto de las identidades regionales, moderno, construido de forma tripartita, con metas claras, responsabilidades definidas, y con un programa de evaluación y mejora continua, lo que nos debería llevar como país a que finalmente, más allá de las cifras mismas, podamos reducir considerablemente los accidentes laborales y especialmente los accidentes fatales, y las enfermedades profesionales, ya que el trabajo debe ser una actividad que permita a las personas desarrollar sus talentos y mejorar su calidad de vida”.

Andrés Santa Cruz, vicepresidente del directorio de la ACHS, haciendo un balance de la labor realizada por la ACHS, afirmó que “hemos reducido de manera significativa los índices de accidentabilidad en nuestro país. En efecto, la proyección al cierre de abril de 2017 indica que la ACHS alcanzó una histórica tasa de accidentabilidad con tiempo perdido entre todas sus empresas adheridas de 2,98%, lo que representa una baja de 45%, en 5 años, evitando que 50.000 trabajadores se accidentes con tiempo perdido cada año. Cabe consignar que esta tasa es aproximadamente un 25% menor que la de nuestro principal competidor. En materia de tasa de accidentabilidad total, es decir, con y sin tiempo perdido, la que hace varios años venimos impulsando que debe transformarse en el índice a través del cual midamos la accidentabilidad de nuestro país, también ha caído de manera significativa, alcanzando un 5,9 al mes de abril pasado”.

Agregó que “también hemos reducido nuestra tasa de accidentabilidad, entre otros factores, gracias a la construcción y aplicación de protocolos médicos sustentados en medicina basada en evidencia, asegurando un óptimo tratamiento y reinsertando al trabajador a su ambiente laboral en el tiempo adecuado”. En materia de experiencia de servicio, destacó “persiguiendo asegurar la más alta dignidad de trato y atención a los trabajadores de la ley de accidentes y enfermedades profesionales, hoy podemos exhibir un 81% de satisfacción neta según el estudio de ProCalidad, ubicándonos entre las 11 mejores instituciones del país en la categoría experiencia de servicio, a nivel de las mejores clínicas de Chile. Todos estos logros obtenidos tienen el único fin: cuidar a los trabajadores de Chile. Los resultados obtenidos hasta el momento son alentadores y nos indican que avanzamos por el camino correcto, pero aún queda mucho por hacer”.

Por su parte, la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, destacó que “las temáticas de seguridad y salud en el trabajo son parte estructural de nuestro planteamiento. La pérdida de capacidad de un trabajador o riesgo de vida muchas veces tiene mucho más valor e importancia que el mismo salario. Podemos avanzar en grandes temas como en el debate previsional, pero si las condiciones de los trabajadores retirados de la vida activa son deplorables, son de agobio, obviamente no se va a resolver sólo con buenas políticas. Hace un par de años atrás nos planteamos el desafío de contar con una política y hoy podemos decir -con una perspectiva positiva- que hemos avanzado en una política de Seguridad y Salud en el Trabajo, pero también sabemos que tenemos un gran desafío, que viene la etapa más compleja y que todos los actores vamos a tener que seguir trabajando en conjunto, como lo hemos hecho hasta ahora, en el debate tripartito, en el diálogo social, porque tenemos que construir la bajada de esta política, en el programa. Tenemos que discutir qué marco legal queremos y cuáles son las cosas que necesitamos, cuáles son los agentes y el rol fiscalizador”.

Figueroa agregó “tenemos un desafío de instalar una cultura que se hace cargo y busque mitigar y evitar el accidente laboral y enfermedad profesional. Sabemos que no depende sólo de la buena norma porque siempre la buena norma puede ser quedada en el olvido. Finalmente, dependerá de la voluntad nuestra, de nuestros trabajadores organizados. Así podemos transitar hacia el compromiso que nos convoca la OIT. En el movimiento sindical tenemos el gran desafío de revalorizar el trabajo y a los trabajadores, haciéndonos cargo de la realidad de éstos”.