Niños y piscinas: Las claves para prevenir asfixias por inmersión este verano

¿Sabías que en Chile la asfixia por inmersión es la primera causa de muerte en menores de 4 años? Si tienes piscina en casa o visitas alguna, toma nota de estas recomendaciones para evitar accidentes que pueden tener consecuencias mortales.

La mitad de los ahogamientos de niños en Chile ocurre en piscinas propias, incluso mientras son supervisados por adultos. Son un tipo de accidente que ocurre repentinamente y en el que el tiempo de reacción es vital para prevenir consecuencias graves.

Las variables que favorecen la ocurrencia de este tipo de accidentes son:

• Edad: ocurre mayormente en menores de 4 años
• Género: son más frecuentes en varones
• Consumos: en el caso de los adolescentes, el consumo de alcohol es un riesgo adicional
• Enfermedades preexistentes: la epilepsia y algunas patologías cardíacas pueden desencadenarse con el agua fría
• Falta de atención: el descuido de los padres y cuidadores es uno de los principales factores que influyen en estos accidentes

QUÉ MEDIDAS IMPLEMENTAR PARA EVITAR AHOGAMIENTOS EN PISCINAS

Si tienes una piscina en casa, es importante que tomes nota de estos puntos para que puedas implementarlos y aumentar la seguridad:

Instala una reja adecuada: debe medir 1.5 metros de alto en todo su entorno y el espacio entre barras no debe ser de más de 10 centímetros. La reja debe ser a prueba de escaladores, es decir, no tener puntos de apoyo para los pies o manos. La puerta de acceso siempre debe estar con candado y el pestillo en el lugar más alto de la reja.

Mantén la piscina sin objetos: no se deben dejar juguetes, pelotas o flotadores en la piscina, porque pueden llamar la atención de los niños y hacerlos caer al tratar de rescatarlos.

Educa a los adolescentes en consumos de riesgo: se debe enfatizar en la educación de los jóvenes para prevenir el consumo de alcohol y/o drogas que pueden agravar un accidente de este tipo.

Usa chalecos salvavidas: los niños deben usar chalecos salvavidas acordes a su edad y peso mientras estén en el agua.

Contrata clases de natación: es recomendable enseñar a nadar a los niños desde muy pequeños. Aun así, siempre deben estar supervisados por adultos mientras estén dentro de la piscina.

Capacítate en RCP: es muy útil que los padres tengan conocimientos sobre Reanimación Cardiopulmonar (RCP) y así puedan actuar con rapidez en caso de un accidente de este tipo o de otros que requieran la maniobra.

Supervisar en todo momento: esto es crucial. Tanto si los niños saben nadar, usan chalecos salvavidas o están con otros niños más grandes, siempre debe haber un adulto observándolos y acompañándolos.

Tener a mano los teléfonos de emergencia: tener estos contactos a la vista ahorra tiempo vital en estos casos.

Otro punto importante, en caso de estar de visita en la casa de un familiar o amigo que tenga piscina, es mapear previamente el entorno. Puede que no se cumplan todas las medidas antes descritas, por lo que se deben revisar las formas en las que un niño podría llegar a la piscina y tomar las precauciones para cada caso.

SI YA OCURRIÓ EL ACCIDENTE, ¿QUÉ HAGO?

Si en una casa con piscina se pierde de vista un niño, lo primero que se debería hacer es revisar el agua de la piscina. En este tipo de accidentes el tiempo es vital y actuar rápidamente puede salvar una vida.

Los tiempos de inmersión son determinantes, ya que sobre los 3 minutos, el riesgo de quedar con daño neurológico se incrementa e incluso existe el riesgo de muerte. Después de los 20 minutos la mortalidad es de un 100%.

Si te enfrentas a este tipo de accidente, sigue estos pasos:

• Intenta mantener la calma para actuar rápida y correctamente
• Saca al niño del agua
• Ve si respira, tiene pulso o alguna lesión traumática visible
• Si respira, ponlo de lado y solicita ayuda de inmediato. Si no respira, inicia la respiración boca a boca tratando de no hiperextender el cuello para evitar lesiones cervicales no diagnosticadas
• Si no hay pulso, inicia masaje torácico 30:2, es decir, 30 compresiones por 2 respiraciones boca a boca. No dejes de ventilar y masajear hasta que llegue personal capacitado
• Todo paciente que ha sufrido ahogamiento debe ser llevado a un servicio de urgencia para su evaluación

PREVENIR ACCIDENTES EN PLAYAS Y LAGOS

Al aire libre, tanto niños como adultos están expuestos a asfixia por inmersión, especialmente si se cometen acciones riesgosas.

En esos escenarios, lo que se recomienda siempre es respetar las señales y advertencias en las playas, que indican cuando son aptas para baño y cuando no. Además, no se deben realizar maniobras arriesgadas como juegos bruscos o piqueros que puedan provocar golpes graves.

Por otra parte y tal como en las piscinas, los niños siempre deben estar acompañados y supervisados por un adulto, aun cuando sólo estén en la orilla.