En la ACHS, los esfuerzos están dirigidos a la prevención de accidentes y enfermedades laborales, pero también a ofrecer atenciones de salud seguras y de calidad en todas sus instalaciones. Quien se encarga de velar por mantener este estándar es la Contraloría Médica, una unidad que revisa en forma activa los procedimientos que se llevan a cabo tanto en las sedes ACHS, como en el Hospital del Trabajador.
Esta entidad, compuesta por tres médicos y dos enfermeras, trabaja identificando los procesos de salud que se ejecutan y sus posibles riesgos (dando prioridad a aquellos más críticos) y evaluando si se realizaron de acuerdo a las normativas legales vigentes y a los protocolos establecidos por el Ministerio de Salud.
De igual forma, atienden los casos de denuncias y reclamos realizando revisiones y auditando en caso de que sea necesario. Si existe algún tipo de incumplimiento, debe informarlo a las áreas correspondientes y corregirlo para que no vuelva a suceder. De esa forma, es posible detectar las fortalezas y falencias en los procedimientos y asegurar un servicio de salud de calidad para todos los pacientes que lo requieran.